miércoles, 15 de febrero de 2012

OTROS TIEMPOS



No es posible creer en la idea de progreso desde el momento mismo en el que a nuestro pasado remoto se le denomina Edad de Oro, mientras que nuestro presente ha llegado tan sólo a la edad del plástico.




2 comentarios:

Mayte Llera (Dalianegra) dijo...

Buena reflexión, Andrei, pero tampoco hay que ser tan derrotistas, hombre, porque en la Edad de Oro florecieron las letras y las artes, pero la gente se moría de hambre y de epidemias, hasta los hidalgos eran harapientos y aunque ahora la crisis nos esté machancando, compara cómo vivimos y cómo se vivía entonces, en qué condiciones y en qué precariedad económica...Cualquier tiempo pasado fue pasado, no mejor.

Besos y feliz semana.

Cristina Brackelmanns dijo...

Del plástico y del uranio, que tampoco es manco.