[Epitafio escueto y enigmático que reza en la tumba de Borges, en Ginebra.
Por nuestra parte, este será el espacio para la poesía y el pensamiento, como la manifestación de la sorpresa que nos asalta por el hecho de vivir. Invitación al sosiego espiritual, después de todo.]
sábado, 21 de noviembre de 2009
COMO TE LO CUENTO
El fatuo se alimenta del aire batido por los aplausos que le dedican.
No hay comentarios:
Publicar un comentario